ASKA School es una microescuela creada con una misión clara: ayudar a niños, jóvenes y adultos a desarrollar y potenciar sus habilidades en expresión oral y escrita, pensamiento crítico, y conciencia ecológica. Este lugar, más que una escuela, es un taller de vida donde se practican valores y se fomenta un aprendizaje significativo a través de actividades lúdicas, audiovisuales y tradicionales.
En ASKA School, cada actividad está cuidadosamente diseñada para adaptarse a los canales perceptivos de los estudiantes, asegurando que el aprendizaje no solo sea efectivo, sino también significativo. Aquí, la educación se convierte en una experiencia que conecta el pensamiento con la acción, fomentando en los alumnos una verdadera conciencia de su entorno y de su papel en la sociedad.
Anny Henríquez, la mente y el corazón detrás de ASKA School, ha dedicado su vida a la educación, guiada por su pasión por la naturaleza y su firme creencia en la capacidad transformadora del conocimiento. Con un enfoque en el desarrollo biopsicosocial, Anny lleva su labor educativa a zonas vulnerables y alejadas, donde la educación formal a menudo no llega. Su amor por las actividades al aire libre y su compromiso con la conciencia ecológica se reflejan en cada aspecto de su enseñanza, haciendo de ASKA School un lugar donde aprender es sinónimo de crecer.