Mi Casita

Damarys Vargas
Damarys Vargas es una apasionada docente con 17 años de dedicación a la educación integral, especialista en la inclusión de personas con discapacidad y actual asesora pedagógica en una destacada institución educativa. Su trayectoria combina la experiencia directa en el aula con el acompañamiento profesional a estudiantes con distintas necesidades, aportando una mirada sensible y técnica que transforma el proceso de enseñanza y aprendizaje. Convencida de que cada estudiante merece una educación adaptada a sus potencialidades, Damarys inspira a colegas y alumnos a construir espacios educativos más inclusivos y enriquecedores.
Juan Germán Roscio - Guárico
Mi Casita
10
Número de alumnos:




Damarys Vargas encabeza la Microescuela Mi Casita de la red El Bello Árbol con el compromiso de ofrecer una atención cálida y cercana. Para ella, cada niño merece sentirse seguro, respetado y acompañado en su proceso de aprendizaje. Desde el primer día, Damarys ha enfocado su labor en crear un ambiente donde el aula cobra la calidez de un hogar y el conocimiento se vive como una experiencia compartida.
La microescuela nació durante los años de la pandemia, un momento de incertidumbre que motivó a Damarys a buscar alternativas para atender las necesidades de los estudiantes. Con materiales diseñados a medida y una planificación meticulosa, Mi Casita se convirtió rápidamente en un refugio de aprendizaje, donde niños y niñas recuperan la confianza en sus capacidades académicas.
Bajo la guía de Damarys, el servicio trasciende el simple apoyo con las tareas. Ella implementa estrategias pedagógicas innovadoras para fortalecer habilidades en lectura, escritura y matemáticas, adaptándose a los ritmos e intereses de cada alumno. Su atención personalizada fomenta el descubrimiento de fortalezas y la superación de obstáculos, movida siempre por la empatía y la paciencia.
Para Damarys Vargas, educar es transformar el sistema formal y regalar a cada niño la posibilidad de crecer con seguridad y alegría. Su visión inspiradora ha hecho de Mi Casita un espacio donde la motivación y el progreso académico van de la mano de la confianza y el afecto, dejando huella en cada pequeño aprendiz.