En el corazón de Montalbán, Carabobo, Yeni Colina convirtió su pasión por la enseñanza en la microescuela ‘Mi Mundo de Colores’, un proyecto nacido de su anhelo por ofrecer una educación cálida y personalizada. Desde sus inicios, Yeni ha forjado un espacio donde cada niño se siente valorado y motivado a descubrir su propio potencial.

Con un grupo reducido de solo cuatro alumnos, la maestra dedica tiempo y dedicación a conocer las fortalezas y desafíos de cada uno. Este modelo le permite adaptar los contenidos y ritmos de aprendizaje a las necesidades particulares, haciendo de cada jornada una experiencia única e inclusiva.

Su método trasciende los libros tradicionales: integra herramientas tecnológicas y dinámicas pedagógicas innovadoras que despiertan la curiosidad y el entusiasmo de sus estudiantes. Bajo su guía, el aula se transforma en un escenario de exploración constante, donde el saber se construye de manera activa y lúdica.

La visión de Yeni Colina es tan sencilla como poderosa: formar jóvenes preparados para un mundo cambiante, capaces de pensar de forma crítica, colaborar y actuar con responsabilidad. A través de valores sólidos y competencias prácticas, ella siembra en cada niño la semilla de la confianza y el compromiso con su entorno.